lunes, 31 de agosto de 2015

La cápsula del tiempo

Retomando el Blog tras la parada estival, me gustaría mostrar la última actividad que realizamos en nuestra clase de Didáctica de las Ciencias de la Naturaleza.



Trabajando desde la Educación Ambiental pretendemos informar, concienciar y ofrecer herramientas para el cambio, para que tras una decisión personal, seamos capaces de modificar pequeños hábitos para ser más respetuosos con el planeta y con el resto de vida con la que lo compartimos.

Para llegar a la tan citada concienciación, es prácticamente imprescindible un vínculo personal con la temática a trabajar. En este caso, con el Medio Ambiente lo tenemos fácil, somos parte de él, y por tanto cuidarlo, no significa más que cuidarnos a nosotros mismos y a las personas que nos rodean.

Nosotros aprovechamos el tema de la educación ambiental como transversal, y durante una de las exploraciones del entorno que realizamos, trabajamos la siguiente reflexión. "Piensa en un espacio natural donde hayas disfrutado de pequeño/a. ¿Te gustaría compartirla en un futuro con tus hijos/as y familiares y amigos/as? ¿En qué estado te gustaría que se encontrara?" Posteriormente en clase, explicamos el concepto de cápsula del tiempo y sus diferentes tipologías, y propusimos realizar nuestra propia cápsula del tiempo en clase, lo que suscitó un gran interés.

Decidimos que personalmente, cada una de nosotras trabajaría un texto, mensaje, música o imágenes que quisiera compartir con sus amigos/as, familiares y compañeros/as. Este texto en formato papel o digital (CD/DVD), lo guardaríamos en una caja y lo enterraríamos, para mantenerlo oculto hasta una fecha marcada. Entre todos decidimos marcar el próximo 1 de mayo del 2025 a las 12h para desenterrarla.
Así que nos pusimos manos a la obra, y el último día de clase recogimos todos los mensajes, los guardamos en la cápsula (en este caso una caja de madera decorada).

Para la elección del lugar, teniendo en cuenta de dónde partió la idea, y guardando el vínculo con el entorno natural, pedimos permiso a nuestros compañeros del Jardín Botánico de la UMA que siempre colaboran con nosotros para todas las actividades, y nos cedieron amablemente un espacio marcado en el propio jardín, y las herramientas para enterrar la cápsula. Y así lo hicimos, unos días después de finalizar el curso nos citamos una representación del alumnado y del equipo del propio jardín, y guardamos nuestros mensajes que mantendrán el secreto hasta que lo compartamos dentro de 10 años.

Aprovecho para adjuntar algunas imágenes de nuestra cápsula del tiempo y para sumarme a la reflexión que desde la propia web del botánico nos lanzan "¿Cómo te ves y cómo te gustaría que fuese todo dentro de 10 años?"